El astro argentino se prepara en el restaurante Laury para el clásico del domingo
25/11/2009
Leo Messi pudo disfrutar de un día tranquilo y sosegado. El puerto de Aiguadolç, en Sitges, era el marco ideal para relajarse, sentarse al sol y disfrutar de una más que merecida comida junto al mar. A pesar de su inoportuna lesión que le obligó a perderse el partido ante el Inter de Milán, el jugador del FC Barcelona, buscó un rincón de paz, quien sabe si para relajarse de cara al fundamental encuentro que disputarán este domingo, el Barça contra el Real Madrid. A Messi se le pudo ver tranquilo y sonriente. Firmó autógrafos y se fotografió con algunas de las pocas personas que se acercaron a interrumpirle la mariscada. Y si fueron pocas no es por falta de carisma, sino porque en Aiguadolç ya están más que acostumbrados a ver a grandes futbolistas en busca de su rincón tranquilo. El primer futbolista que visitó Aiguadolç poco después de su inauguración fue Edson Arantes do Nascimento, "el gran Pelé". Luego siguieron su ejemplo Cruyff, Maradona, Stoichkov, Figo, Ronaldinho. Curiosamente todos éstos -excepto Pelé- han sido Balon de Oro. Si todo apuntaba a que Messi será el próximo Balón de Oro, ahora ya no cabe ninguna duda.
FOTO - Un simpático Leo Messi se fotografió con el gerente del puerto de Aiguadolç, Albert Bertrán, frente a la torre del puerto
SBC comunicación
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